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Bridgestone Invitational 2011 (World Golf Championship)

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Alfonso Martínez | 03 de agosto de 2011

Crónicas diarias

Primera jornada
Larrazábal comienza fino en el Bridgestone Invitational

La pareja Scott-Williams golpea primero

Segunda jornada
Cuádruple empate en cabeza en el Bridgestone Invitational

Tercera jornada
Scott y la nueva generación mandan en el Bridgestone Invitational

Jornada final
Victoria incontestable de Scott en el Bridgestone Invitational

Steve Williams se desmelena tras la victoria de Scott

Arranca en el Firestone Country Club de Akron, en el estado de Ohio, una nueva edición del Bridgestone Invitational, el tercero de los campeonatos de las series mundiales de golf que repite en su condición de inmejorable plataforma de lanzamiento de un mes de agosto que dentro de una semana alcanzará su cénit con el PGA Championship y que luego dará paso a un septiembre que culminará con el inicio de los playoffs de la FedEx Cup del PGA Tour, y donde cuatro españoles tratarán de darle continuidad al éxito europeo y terminar con una sequía de ocho años, demasiada para esta época de bondades majoristas y de match play en el viejo continente.

Desde que en 2003 Darren Clarke se adjudicara lo que entonces se conocía como NEC Invitational con una renta de cuatro golpes sobre un Jonathan Kaye que un año después viviría el momento más feliz de su irregular carrera profesional al ganar el FBR (Phoenix) Open, ningún europeo ha podido hacerse con un torneo sinónimo de Tiger Woods, ganador en siete ocasiones, seis de ellas en dos trienos (1999–2001, 2005–2007, 2009).

Ahí quedan los infructuosos esfuerzos del irlandés Paul McGinley, tercer clasificado a dos golpes de la cabeza en la edición de 2005, de los ingleses Paul Casey en 2006 (cuarto, a tres impactos) y Lee Westwood en 2008 (incapaz de cerrar un torneo que consiguió liderar bien entrada la cuarta jornada), y muy especialmente el de Pádraig Harrington, líder destacado a falta de dieciocho hoyos en el Bridgestone Invitational de 2009 pero abonado a un traumático y acuático triple bogey en el 16 que le abría las puertas a un agresivo Tiger Woods.

Si nos miramos algo el ombligo, es la sexta posición de Miguel Ángel Jiménez en 2009 a seis golpes de Tiger Woods lo mejor que podemos llevarnos a la boca de la historia reciente de un torneo que en sus años de NEC World Series of Golf sí adoptó sabor hispano en la persona de José María Olazábal (1990, 1994), aunque si por algo se ha caracterizado desde sus inicios es por el incontestable dominio estadounidense.

Durante la década de los setenta y de los ochenta, cuando surge este campeonato por invitación del PGA Tour, los muchachos del Tío Sam se adjudicaron la friolera de once de las quince ediciones celebradas, y solo la puntual aportación de los zimbabuenses Nick Price (1983) y Denis Watson (1984) y el sudafricano David Frost (1989) evitaron un pleno que reflejaba a la perfección la enorme superioridad del golf estadounidense.

Con la llegada de los noventa, la hegemonía yanqui se redujo al nivel de mayoría cualificada y todo gracias a la comentada aparición de José María Olazábal que encontró relevo en el australiano Greg Norman (1995, 1997), y donde ningún golfista norteamericano consiguió inscribir su nombre en el historial del torneo a excepción de Craig Stadler (1982, 1992) y a pesar de los intentos de Phil Mickelson (1996) o David Duval (1998).

Sin embargo, la integración del NEC Invitational en los neonatos campeonatos de las series mundiales de golf trajo consigo una circunstancia que ha terminado por definir su existencia: la individualización del mismo en el arrollador éxito de Tiger Woods, séptuple ganador en los trienios 1999–2002 y 2005–2007, además de en 2009, fecha de su último entorchado.

Una vez más, repetimos nuestro veraniego formato de 12 + 1 claves para que no perdáis detalle de un WGC Bridgestone Invitational que otorga 1.400.000 $, 76 puntos del OWGR y 550 puntos de la FedEx Cup (PGA Tour) al ganador, y que podréis seguir en riguroso directo a través de los diales 53 y 120 de Digital+ (Canal+ Golf y Canal+ Deportes HD2).

1. Con la única salvedad del sudafricano Tim Clark, en fuera de juego desde el The Players Championship de mayo, donde defendía el título de 2010, la práctica totalidad del top 50 de la clasificación mundial (a 25 de julio y 1 de agosto de 2011) se dará cita en los rápidos greenes del Firestone Country Club de Akron, en el estado de Ohio.

El resto de criterios contemplados en la lista de entradas se mueven desde los integrantes de los equipos europeo y estadounidense de la última Ryder Cup disputada hasta los campeones de todos aquellos torneos profesionales con un peso en el baremo del OWGR superior a los 115 puntos totales (para simplificar, 26 o más puntos del OWGR al ganador; el Open de España, por poner un ejemplo, únicamente otorgaba 24, el mínimo estipulado para un evento del PGA Tour y del Circuito Europeo) disputados entre la semana posterior al WGC Bridgestone Invitational de 2010 y la anterior a la presente edición.

Para profundizar en su carácter de mundial, en cada edición se invita a los ganadores de determinados torneos pertenecientes a los menores circuitos japonés (Bridgestone Open de 2010, Japan Golf Tour Championship de 2011), asiático (Iskandar Johor Open de 2010), sudafricano (Dimension Data Pro-Am) y australiano (Australian PGA Championship). En total, setenta y seis afortunados golfistas que se llevarán, en el peor de los casos, un más que aceptable cheque de 35.500 $.

2. Si prestamos atención a la división de los golfistas por su país de procedencia, los Estados Unidos, como no podía ser menos, sobresalen con una treintena de representantes, o lo que es lo mismo, casi un cuarenta por ciento del “field” total. A una prudente distancia le siguen el Reino Unido con nueve (cinco ingleses, tras la baja de última hora de Ross Fisher, que ha renunciado por motivos familiares, tres norirlandeses y un escocés), Australia (7) y Sudáfrica (6). Por detrás, España, Suecia y Corea del Sur se sitúan con cuatro jugadores, mientras que Italia (3), y Japón y Dinamarca (2) son los otros países que multiplican sus opciones de victoria final. Con un integrante quedarían Alemania, la India, Irlanda y Venezuela, mientras que Thomas Levet debía defender los colores franceses pero sigue sufriendo las consecuencias de su imprudente salto al obstáculo que custodia el hoyo 18 de Le Golf National.

Un rápido vistazo a la distribución de 1999, cuando se disputó la primera edición del renombrado NEC Invitational, observamos cómo los Estados Unidos seguían copando esta estadística con diecisiete jugadores , y cómo estaba secundada por el Reino Unido, entonces por el buen hacer de los escoceses Colin Montgomerie (en pleno apogeo de órdenes de mérito), Paul Lawrie (The Open Championship) y Andrew Coltart (Ryder Cup), y por España y Australia que compartían la tercera plaza con tres representantes. Será verdad que el golf estadounidense a falta de líder continúa movilizando a la principal fuerza golfista.

3. Álvaro Quirós (25º OWGR, Omega Dubai Desert Classic de 2011) pisará por tercera vez consecutiva un escenario que en 2009 le significó una más que esperanzadora decimoquinta posición. Lastrado por una recurrente lesión en la muñeca derecha (aunque las últimas noticias son halagüeñas y parece acudir a Firestone en perfecto estado ), el guadiareño buscará desquitarse del quincuagésimo cuarto puesto en el The US Open Championship y los dos cortes fallados en Paris y Londres. Por si acaso ésta fuera la vencida, el norteamericano D. A. Points (111º, AT&T Pebble Beach National Pro Am de 2011) será testigo directo de la precisión desde el tee de nuestro bombardero durante las dos primeras jornadas.

4. Como comentábamos anteriormente, Miguel Ángel Jiménez (29º OWGR) tiene el honor de haber registrado la mejor actuación española en esta nueva etapa del torneo. Vigesimoquinto hace dos semanas en el Royal St. George’s, el malagueño regresa a un recorrido donde a excepción de 2008 (T10º) y 2009 (T6º) siempre ha finalizado fuera de los veinte primeros de la clasificación final.

En este torneo sin corte, el triple ganador en el Circuito Europeo la temporada pasada (Omega Dubai Desert Classic, Alstom Open de France, Omega European Masters) formará pareja con un veterano de guerra estadounidense de muchas Ryders, David Toms (26º), vencedor del PGA Championship en 2001 y más recientemente del Crowne Plaza Invitational at Colonial, con el que ponía fin a cinco años inéditos en el PGA Tour.

5. Sergio García (49º) acude al campeonato de las series mundiales donde atesora un peor balance histórico. Séptimo en 1999, desde entonces solo ha rondado el top ten en dos ocasiones (2004, T16º; 2005, T13º), resultado insuficiente para todo un ganador del HSBC Champions (pre WGC) en 2008, y, sobre todo, un seis veces finalista de honor del Cadillac Championship (T3º en 2005 y 2007, T4º en 2004, T5º en 2000, 7º en 2002).

Esta temporada acumula un subcampeonato en Múnich, una séptima posición en el The US Open Championship, una octava en el Arnold Palmer Invitational y dos novenas en el The Open Championship y el Volvo Golf Champions. El sudafricano Retief Goosen (20º) será su partenaire durante los primeros treinta y seis hoyos.

6. A Pablo Larrazábal (95º) no se le recordaba en tan buen estado de forma desde su victoria en el Alstom Open de France de 2008 y esta semana disputa su primer Bridgestone Invitational gracias a su sufrido triunfo en el BMW International Open. Sin embargo, si algo está caracterizando la hoja de resultados del barcelonés en esta temporada es su incapacidad de superar el corte en los grandes torneos del Circuito Europeo, The Open Championship incluido, excepción hecha del Abu Dhabi HSBC Champions de mediados de enero, donde concluyó undécimo.

Ya veremos qué le depara el Bridgestone Invitational al golfista barcelonés, aunque lo cierto es que le debería servir de piedra de toque antes de la disputa del PGA Championship, donde volverá tras un lapso de dos años (corte fallado en 2008). Por si acaso, que intente empaparse de la experiencia de su compañero de fatigas, el estadounidense Zach Johnson (32º), ganador de la chaqueta verde en 2007. Por lo pronto, Pablo tiene magníficos recuerdos del jugador de Iowa, ya que compartió partido con el en su primer major en 2008.

7. Los ingleses Luke Donald (1º, WGC Accenture Match Play Championship, BMW PGA Championship de 2011) y Lee Westwood (2º) retoman su particular lucha por la supremacía mundial, si bien esta ha quedado algo adelgazada tras la victoria del primero en el The Barclays Scottish Open de Inverness. Para que se produjera el vuelco, el vencedor de la Race To Dubai de 2009 necesitaría ganar y que su compatriota no finalizara entre los quince primeros.

En lo que respecta a la lista de ganancias del Circuito Europeo, el primer premio de aproximadamente un millón de euros del Bridgestone Invitational se antoja trascendental de cara a reducir la enorme brecha que en estos momentos separa a Luke Donald de su más inmediato perseguidor, el sudafricano Charl Schwartzel (10º OWGR, The Masters Tournament de 2011), y superior al millón doscientos mil euros, y que es precisamente uno de los emparejamientos estelares del inicio del torneo.

8. Del resto de horarios de salida, hay que destacar el de Lee Westwood y Graeme McDowell (12º, The US Open Championship de 2010), el de Steve Stricker (4º, John Deere Classic, The Memorial Tournament de 2011) y Nick Watney (9º, WGC Cadillac Championship, AT&T National de 2011), el del defensor del título, Hunter Mahan (19º) y Rory McIlroy (5º, The US Open Championship de 2011), y el de Martin Kaymer (3º, PGA Championship de 2010, Abu Dhabi HSBC Championship de 2011) y Bubba Watson (14º, Farmers Insurance Open y Zurich Classic of New Orleans de 2011), con el alemán buscando la revancha de la derrota en el exhibitional match play del sábado pasado en Düsseldorf… y el de Tiger Woods (en una inaudita vigesimoctava posición en el ránking mundial) y Darren Clarke, flamante vencedor del The Open Championship.

Más información en estos enlaces a la lista de entradas y la clasificación online y shot tracker.

9. Hablemos de Tiger Woods. Su reciente “divorcio” con el caddie neozelandés Steve Williams, su porteador en trece de sus catorce majors y sesenta y tres de sus setenta y una victorias, ha ahondado las dudas que se ciernen sobre su enésimo regreso a la actualidad profesional, esta vez desde el agravamiento de su lesión durante el transcurso de la primera jornada del The Players Championship, torneo del que se retiró.

Esta novedosa situación se une a las declaraciones de su entrenador, Sean Foley, quien el pasado veinticinco de julio afirmó que su pupilo no había trabajado con él durante todo este tiempo el apartado técnico. “We have not hit any balls” (no hemos tocado bola) fueron sus contundentes palabras… y las casas de apuestas pagan su victoria a 18 a 1… Sin embargo, Tiger ha afirmado posteriormente que lleva tres semanas pegándole al driver… ¿en qué quedamos?

10. The Firestone Country Club es el hogar natural del Bridgestone Invitational desde los pretéritos tiempos de las NEC World Series of Golf. La cuidada presentación de este parkland de 7.400 yardas, par 70, es una de las señas de identidad del torneo, siempre y cuando descontemos la fallida experiencia de 2002, momento en el que los rectores del PGA Tour apostaron por poner a prueba la capacidad de convocatoria del área metropolitana de Seattle a la hora de albergar un gran torneo, y decidieron moverlo a un Sahalee Country Club donde no se alcanzó el mínimo exigido de asistencia (en torno a los veinte mil espectadores por jornada) y donde, para colmo, no ayudó la escasa entidad del ganador final, el australiano Craig Parry.

Fundado en 1928 por el magnate de los neumáticos Harvey Firestone, lo que en un principio se ideó como un campo de golf a disposición de los empleados de la fábrica, en la actualidad se ha convertido un vastísimo complejo de golf privado que cuenta con tres recorridos: South (sede del Bridgestone Invitational), North y West, todos ellos de altamente cualificados para acoger un torneo internacional de primera fila (Championship courses).

11. The South Course ha sido sede de más de treinta torneos desde que en 1954 acogiera la primera edición del The Rubber City Open Invitational, una parada regular de lo que entonces se conocía como Circuito de la PGA (no sería hasta 1968 cuando el PGA Tour se desligaría de su matriz), y donde sobresalen los tres PGA Championships (1960, 1966 y 1975). En 1973, pasó a la historia del golf estadounidense al convertirse en el único campo de golf en recibir tres paradas del PGA Tour en una misma temporada, The American Golf Classic, The CBS Golf Classic y The NEC World Series of Golf.

Aunque fue diseñado originalmente por Bert Way en 1928, este larguísimo parkland (7.400 yardas, par 70) agradeció la remodelación efectuada por el prestigioso Robert Trent Jones sénior en 1959, cuando añadió cerca de cincuenta búnkeres, dos lagos, y alargó el recorrido hasta las 7.189 yardas. Posteriormente, ha sufrido diversos retoques, como el de Golforce en 1985, y, el más reciente, en 2006, cuando se retrasaron algunos tees para establecer su longitud actual.

12. The South Course fue apodado “el monstruo” (The Monster) por Arnold Palmer durante el PGA Championship de 1960, tras firmar un triple bogey en el 16. En 2007, sus 7.400 yardas y unas duras condiciones meteorológicas lo convirtieron en el cuarto recorrido más difícil del PGA Tour (el decimoquinto en 2010) y en su carta de presentación brillan con luz propia unos descomunales pares 4 (todos por encima de las cuatrocientas yardas, a excepción del 1, que se limita a 399… Y muchos superando las 460, 470, 480 y hasta las 490 yardas), y el par 5 más largo del Circuito, el 16, con sus 667 yardas a sus espaldas. Sin olvidarnos de que tres de los cuatro pares 3 rebasan las doscientas yardas…

Si nos apoyamos en los hechos del 2010, el recorrido sur del Firestone Country Club se descubrió como el de los greenes más difíciles de alcanzar desde menos de 125 yardas (72,65 %), como el tercero con mayores problemas a la hora de abordar la bandera desde menos de 100 yardas (diecinueve pies de media de distancia entre la bola y el hoyo), el quinto con menos porcentaje de birdies desde la calle (19,02 %)… Algo tendrán estos greenes de Poa Annua y no solo que rueden a una vertiginosa velocidad de trece pies en el stimpmeter.

12 + 1. Los platos fuertes de la temporada se terminarán la semana que viene con el PGA Championship, y hay algunos golfistas que no pueden permitirse otro año más en blanco, como Lee Westwood, que se ha puesto en manos del gurú del putter Dave Stockton y el prestigioso psicólogo Bob Rotella.

Eficaz o no, McIlroy se reunió con Stockton un mes antes de su entorchado en el Congressional y Clarke hizo lo propio con Rotella apenas unos días antes del inicio del The Open Championship…