Zona Pro
Se busca redención en el TPC Four Seasons
Carlos Palomo | 18 de mayo de 2014
«Va a ser una gran oportunidad de ver si doy la talla contra algunos grandes jugadores de los últimos diez años.» Brendon Todd tiene en su mano conseguir su primera victoria en el PGA Tour en el HP Byron Nelson Championship. Y además, hacerlo a lo grande, imponiéndose a tres ganadores de majors como Padraig Harrington, (sexto con -8), Mike Weir (tercero con -9) y Louis Oosthuizen, jugador con el que comparte el coliderato en -10.
Tan apretada está la clasificación por la cabeza, con doce jugadores en apenas tres golpes, que de no haber logrado Todd el birdie en el hoyo 18 del TPC Four Seasons el americano hubiera quedado relegado al antepenúltimo partido del domingo. Tras doce pares consecutivos, concluyó el moving day a lo grande para firmar un 68 (-2) con el que se reivindicaba como aspirante a la victoria.
Finalmente jugará en el partido estelar junto a un Louis Oosthuizen que, al igual que Weir y Harrington, cuenta en sus últimos años con cierto historial de lesiones y cambios. Con vueltas de 68, 68 y 64, buscará hoy su primera victoria en Estados Unidos. La única que computa en su curriculum en el PGA Tour fue la de Sant Andrews en el Open Championship de 2010.
Hace un año, en este mismo torneo, se vio obligado a retirarse tras 54 hoyos por problemas en el cuello. «Me está costando llevar mi juego donde quiero algo más de lo que pensaba», reconoció en una declaración que bien podríamos haber atribuido tanto a Harrington como a Weir.
Ambos también buscarán su propia historia de redención este domingo. Weir lo hará en su decimosegundo torneo consecutivo en el que pasa el corte después de que en los últimos cuatro años acumulara solo tres presencias en el fin de semana en 39 torneos. Desde el puesto 609º del mundo, partirá desde el -9 al igual que James Hahn y Gary Woodland.
A solo un golpe de esta cifra nos encontramos el -8 de cuatro jugadores entre los que destaca Harrington, autor de una vuelta de 66 golpes (-6). «Creo que cada semana puede ser la mía, pero al final no ocurre. No es fácil cuando las cosas no van bien. Es frustrante, pero hay que seguir».
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