La gran mayoría de los casi 30.000 espectadores que vendrán a Muirfield en la jornada definitiva esperan ver ganar a Lee Westwood su primer Grande y, de paso, el torneo que por encima de todas las cosas desea ganar un británico: el Open Championship. Para ello tendrá que afrontar muchos obstáculos a lo largo de los 18 hoyos del campo, empezando por el mismo escenario, Muirfield, que se está mostrando como una de las sedes más crueles de los últimos tiempos, y terminando con la figura del actual número uno del mundo, Tiger Woods, que está a sólo dos golpes del inglés.
Entre los demás «obstáculos», no podemos olvidarnos del trío de españoles que parten con opciones, aunque a muchos les puedan parecer remotas. Sergio, al firmar la mejor vuelta del día, consiguió rozar el top ten y, lo que es mucho más importante para él, llegar a la última jornada con opciones de victoria. A seis golpes, dirán algunos, y es cierto que son puras matemáticas, pero en Muirfiel y con las condiciones y banderas que pueden presidir esta última jornada seis golpes pueden recuperarse. ¿Sergio lo puede hacer? Por supuesto, aunque no sabemos qué cara nos va a ofrecer y sus últimos Grandes no invitan al optimismo. Pero siempre tiene que haber una primera vez, y tal como Westwood busca su primera victoria en un Grande, esa búsqueda puede ayudar a Sergio en la misma medida.
Lo dicho de Sergio sirve también para Miguel Ángel o para Rafa Cabrera. Ayer los dos dieron la de cal, pero como bien decía Miguel al terminar, “yo no me descarto para mañana”. Y su experiencia aquí es un grado. No olvidemos, por ejemplo, que Ernie Els ganaba el año pasado estando a seis golpes de Adam Scott a falta de 15 hoyos. ¿Por qué no lo pueden conseguir ellos que están a seis y siete?
Sin duda alguna, el duelo que todos esperan dentro de unas horas es el que van a protagonizar a distancia Westwood con Tiger. Salvando las distancias,los dos se encuentran en situaciones similares. El uno y el otro persiguen un Grande, Tiger porque lleva cinco años sin poder sumar uno más a los catorce que ya tiene, y Westwood porque siente que se le está pasando el arroz y todavía no ha caído el primero. El inglés no empezó con buen pie este Open Championship, pero una magnífica segunda jornada y una tercera no menos buena junto a Tiger le han llevado a colocarse en una situación desconocida para él hasta la fecha y de ahí la incógnita de saber cómo se va a comportar. Eso sí, tendrá el apoyo de todo el público pero, ¿será suficiente para parar al número uno del mundo?
Tiger ha venido con una idea clara a Muirfield… o para para ser más exactos, con dos. La primera, ganar su decimoquinto Grande tras un periodo de cinco años de sequía; y la segunda, tomarse la revancha de un campo que le humilló como ninguno lo ha conseguido desde que es profesional. Fue en 2002 y aquel día, el primero de ese Open, si no llega a ser por la cercanía de O’Meara su resultado habría estado claramente por encima de 90 golpes. Pero Tiger es inteligente, esa es su mejor virtud y le ha llevado a conseguir tantas victorias, y sabe que la venganza es un plato que se sirve frío y ya han pasado once años desde aquel colapso, tiempo suficiente para consumar su venganza. De momento no se ha desviado de la hoja de ruta que tenía prevista tras estudiar y jugar con mimo el campo los días previos al torneo. Y esa hoja de ruta le ha llevado a estar en segunda posición a sólo dos golpes de la cabeza.
Pero esto es golf y este duelo que todo lo eclipsa lo podrían aprovechar jugadores como Ángel Cabrera, Hunter Mahan o Adam Scott para llevarse el gato al agua. ¿Podrían Tiger y Westwood soportar un nuevo fracaso? Lo sabremos dentro de unas horas.
Javier Pinedo es la voz del golf en nuestro país. Este periodista especializado atesora un currículum inigualable y lleva en el «zurrón» innumerables majors, Ryder Cups y competiciones de primer nivel. Gracias a su experiencia y conocimientos, se ha convertido en una referencia ineludible tanto en las retransmisiones televisivas de Canal+ Golf como en su columna mensual en la revista Golf Digest. Esta semana Javier Pinedo está desempeñando su labor en Muirfield y nos acompañará con una serie de columnas desde la sede del Open Championship 2013.
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