• Mañana viviremos un precioso espectáculo de golf en la jornada final del DP World Tour Championship entre los colíderes Rory McIlroy. Jugadores con muchas cosas en común pero cuya respectiva potencia les hace jugar de forma completamente diferente algunos hoyos del Earth Course. Valga de ejemplo el hoyo 12 en el que McIlroy atacaba el green con wedge mientras que Donald hacía lo propio con el hierro 6. No hay que olvidar que hay jugadoras del LPGA que tienen estadísticas de distancia de drive similares a las suyas.
• Lo que el inglés está haciendo en Dubai es una muestra increíble de constancia. Con su tarjeta impoluta de bogeys hasta el momento tras los 54 hoyos de torneo, suma ya exactamente 100 hoyos sin cometer ningún fallo en este campo. El último fue en el hoyo 8 en la segunda vuelta de 2011. La última vez que se ganó en el European Tour un torneo sin bogeys fue en 1995 y el autor de la hazaña fue Jesper Parnevik en el Scandinavian Masters.
• Aunque para regularidad, la de Rafa Cabrera-Bello. Tres vueltas de 70 golpes (-2) resumen su periplo por Dubái. Es el único jugador que ha repetido resultado en las tres jornadas y el propio implicado se lo tomaba a broma en su twitter: «Dos y dos son cuatro, cuatro y dos son seis… A ver mañana las que me tocan… pero como sea como la canción… #necesitoalgomas!»
• Sabor español hoy en el partido que unió a Pablo Larrazábal y Miguel Ángel Jiménez hoy sábado. Ayer noche ambos compartían paella para cenar y Pablo confiaba en que ésta fuera amuleto: «Con un poco de suerte, esta paella va a ayudar a hacer birdies a los de la partida de las 8.50. « Finalmente, seis birdies fueron los que sumaron ambos, cuatro de Jiménez y dos de Larrazábal.
• La vuelta más baja del día hoy fue la realizada por Jeev Milkha Singh. A pesar de seguir recuperándose de una lesión en la mano firmó una tarjeta de 64 golpes dedicada a su madre, que ayer sufrió una caída y tuvo que ser ingresada en la UCI. El propio Singh se enteraba de la noticia apenas minutos antes de comenzar su tercera vuelta y, como no podía ser de otra manera, tras firmar nueve birdies y un solo bogey dedicó la vuelta a su progenitora.
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