Poom Saksansin, durante la segunda vuelta de la Queen's Cup (foto cortesía del Asian Tour)
El novato tailandés Poom Saksansin sigue deslumbrando en la Queen’s Cup, torneo del Asian Tour que se disputa esta semana, y después de 36 hoyos conserva el liderato con dos golpes de ventaja sobre el coreano Seuk-hyun Baek.
El resultado del jugador de 21 años es especialmente meritorio en un Santiburi Samui Country Club que recibe el merecido apodo de «Bestia de Samui» y que se ha cebado con un buen número de jugadores, entre los que desgraciadamente se encuentra el ilerdense Carlos Pigem. Al español no le salía nada en esta segunda jornada y no le quedaba más remedio que despedirse del torneo con un duro 79 en la prueba que sirve para echar el cierre de la primera mitad de la temporada.
Saksansin, uno de los héroes locales, intenta prorrogar la magnifica racha del golf tailandés en este torneo celebrado en honor de la reina de este país del sudesde asiático (llevan cuatro victorias en las cinco últimas ediciones), aunque para reforzar las opciones nacionales también está otro novato, Donlaphatchai Niyomchon, que se encuentra a tres golpes, y Chinnarat Phadungsil, antiguo campeón, que es cuarto a cinco golpes.
«He fallado algunos golpes, pero he tenido suerte. Hoy he recuperado seis veces para par, a veces desde el collarín», declaraba Poom, que solo necesitó 26 putts por segundo día consecutivo. «Le he pegado bien al drive y, si fallaba, lo hacía en buen sitio».
El líder actual de la orden de mérito, el indio Anirban Lahiri, entregó un 68 para acabar a diez golpes de los líderes y dejarse alguna opción remota de entrar en el US Open con un gran fin de semana que tendría que rematar en victoria.
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