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Marc Leishman, el candidato oculto

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Enrique Soto | 25 de junio de 2012

Nadie esperaba que el australiano pudiera conseguir la victoria

Ni Brian Davis, ni Roland Thatcher, ni James Driscoll consiguieron ganar por primera vez en el PGA Tour después comenzar la última jornada en los primeros puestos de la clasificación del Travelers Championship. En lo que se suponía la tarde de los aspirantes, todos ellos sucumbieron a la presión y, sobre todo, a los últimos cuatro hoyos del TPC River Highlands. En su lugar, Marc Leishman viniendo desde atrás consiguió ocho birdies y ni un solo error en su vuelta, entregando una tarjeta con 62 golpes que le distinguiría como ganador por primera vez en el circuito. Su victoria sorprendió hasta a los cámaras, que apenas grabaron los golpes del australiano.

“Es un gran torneo por esos últimos cuatro hoyos, por todas las cosas que pueden suceder en esa franja”, comentó uno de los aspirantes, Roland Thatcher. “No hay un liderato seguro llegando a esos cuatro hoyos finales. Son muy difíciles pero también hay algunas oportunidades de birdie.” Y es que a diferencia de Charlie Hoffman, que terminó en segunda posición después de hacer tres arriba del campo en los dos últimos hoyos, Leishman finalizó la última parte del recorrido con dos golpes bajo el par. No existen muchos casos similares en el resto de torneos del PGA Tour.

Es la quinta vez en siete años que un jugador consigue su primera victoria en el circuito en este torneo, aunque en esta ocasión no parecía que fuera a suceder así. Cuando Leishman terminó su vuelta, Charlie Hoffman ya le había adelantado en la clasificación y llegó a adelantarse hasta por tres impactos. Entonces, mientras el líder en casa club comía algo y seguía el partido de fútbol, sus rivales empezaron a desmoronarse en los últimos cuatro hoyos. Hoffman tiró su bola al agua en el diecisiete y firmó un doble bogey, para después fallar la recuperación desde un bunker de green en el dieciocho. “Desde donde estaba la bandera en 17 (par 3) el golpe de salida era complicado”, comentó al finalizar su vuelta. “Puedo vivir con eso. Lo que hice en el 18 fue bastante patético”.

Bubba Watson, ganador aquí hace dos años, se quedó a un solo golpe de empatar en cabeza. “Si echas un vistazo atrás en mi historial en este torneo, siempre me he ido al agua”, declaró el ganador del Masters. No fue así esta vez. Bubba finalizó sus nueve primeros hoyos en cuatro bajo par y no consiguió más que un birdie por los segundos, finalizando con 65 golpes y en segunda posición. Dejando a parte su victoria en Augusta, es la tercera vez esta temporada que el americano finaliza entre los cinco primeros y confirma que el haber ganado un major no le ha añadido presión, sino que le ha aumentado la confianza.

A dos golpes de la victoria se quedaron Tim Clarke, Brian Davis, John Rollins y Roland Thatcher. En uno de los torneos con más candidatos al triunfo en lo que llevamos de temporada, los últimos cuatro hoyos del recorrido demostraron estar a la altura de las circunstancias y otorgaron al público un final impredecible. “He jugado esos cuatro hoyos muy mal durante toda la semana”, admitió el ganador. “Era un gran reto jugarlos bajo par”.