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Zona Pro

La espalda de Woods nubla el Masters

Enrique Soto | 19 de marzo de 2014

“He llamado personalmente a Arnold para decirle que, tristemente, no podré jugar en su torneo este año. Quiero pedir disculpas a los aficionados de Orlando, a los voluntarios, la dirección del torneo y a los sponsors por perderme el evento. Desafortunadamente, los espasmos en la espalda y el dolor se mantienen”. Así, en una nota en su página web, se despedía Tiger Woods de su defensa del Arnold Palmer Invitational, el tercer campeonato que ganó en el PGA Tour en 2013. En tan solo doce meses, las cosas han cambiado mucho para el número uno del mundo.

Y lo han hecho porque el cuerpo atlético y robusto de aquel chico que ganaba grandes cada temporada se ha tornado en algo débil y quebradizo, ya sea desde su rodilla al talón de Aquiles o, ahora, con su espalda. “Es difícil ser joven tanto tiempo”, dijimos el mes pasado, cuando estos problemas dieron sus primeros síntomas. Lo que no esperábamos es que a poco más de veinte días para el Masters, esas molestias persistieran. “Es demasiado pronto para saber algo del Masters”, añadió Woods. “Continuaré siendo tratado y trabajando de cerca con los doctores. Me siento mal por no poder jugar este gran torneo esta semana”.

Si renuncia a competir en una prueba que ha ganado en ocho ocasiones, no es de extrañar que el Augusta National haya amanecido nublado esta mañana. “Obviamente, le echaremos de menos”, ha declarado Arnold Palmer. “Me llamó para decirme que su espalda le estaba dando problemas todavía y que sentía que no debía jugar. Le dije que lo entendía y le deseé lo mejor”.

Así, un evento que se planteaba como una batalla más en la cumbre del golf, se queda algo cojo en lo que se suponía como un buen adelanto de los majors. Su ausencia, sin embargo, deja todavía en Bay Hill a muchos candidatos a triunfar en Augusta. Allí estarán Adam Scott, Justin Rose o Bubba Watson, recientes ganadores de un grande. En una prueba con ellos entres sus participantes es difícil pensar que no haya mucho en juego esta semana.

En la clasificación queda el acumulado de menos trece que Tiger necesitó en las dos últimas ediciones para alzarse con la victoria. Ese registro, por otra parte, bien podría ser sobrepasado por varios hombres que llegan en un buen momento a la competición. El propio Scott lleva nueve pruebas consecutivas entre los veinticinco mejores, Rose finalizó octavo en Innisbrook y segundo en este evento en 2013, Graeme McDowell destaca cuanto mayor sea la exigencia del recorrido, al igual que Hunter Mahan, que lleva cuatro top 10 en seis salidas. Patrick Reed, Brandt Snedeker, Rickie Fowler, Ian Poulter, Lee Westwood, Keegan Bradley o Jamie Donaldson son otros de los hombres que suenan para el domingo por la tarde.

Gonzalo Fernández-Castaño será el único español en el campo. No ha sido un comienzo de temporada sencillo para el madrileño, que guarda como mejor registro en 2014 una vigésimo cuarta plaza en el Honda Classic. Hace doce meses, sin embargo, y en este mismo escenario, se alzó hasta la tercera posición en lo que fue una gran racha de resultados hasta el US Open, en la que consiguió la tarjeta del PGA Tour y concluyó en una victoria en Shanghai (BMW Masters). Los buenos recuerdos suelen volver a los golfistas de vez en cuando, incluso a mitad de una ronda. El cambio de tendencia que necesita para llegar a la Ryder podría esconderse en cualquier esquina del torneo de Palmer.

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