Prensa
La calidez de la madera se integra en las piscinas de los campos de golf
Redacción | 25 de mayo de 2013
Los jugadores de golf profesionales o aficionados que recorren el circuito nacional comienzan a valorar también aquellos alojamientos que les faciliten horas de descanso con mayor relax o confort.
Un hotel o urbanización residencial con piscina o spa, de los que puedan disfrutar prácticamente todas las estaciones del año, aparecen como factor de decisión para los deportistas, sobre todo si en sus desplazamientos van acompañados de pareja o familia con hijos pequeños.
Así, los hoteles o residenciales buscan soluciones innovadoras para proporcionar áreas de baño o balneoterapia adecuadas, sobre todo en primavera o en las semanas más benignas del otoño y del invierno.
Una cubierta de piscina y de spa es uno de los elementos de protección que garantizan una mejor climatización y ahorro energético para dichas instalaciones. Elevan la temperatura de seis a ocho grados de manera natural y protegen el área de baño del posible mal tiempo.
Dentro de las nuevas tendencias de microarquitectura para jardines y terrazas de hoteles, urbanizaciones y campos de golf, destacan los diseños fabricados en madera, un material muy sólido y resistente, que se integra con zonas ajardinadas, arboledas o bosques colindantes.
“La nueva colección de cubiertas de piscina y spa de madera Abrisud apuesta por la durabilidad y la resistencia para así garantizar esos momentos de descanso íntimos y necesarios para los jugadores de golf alojados en hoteles o residenciales cercanos. Es una de las gamas de productos premium más demandada”, explica Fabrice Villa, codirector de Abrisud Ibérica.
Con estos diseños, Abrisud recupera las instalaciones artesanales fabricadas en madera laminada-encolada. La madera no solo se mimetiza con el entorno natural de jardines y terrazas, sino que es más resistente mecánicamente que los materiales utilizados para las cubiertas telescópicas.
“Estas maderas, además, proceden exclusivamente de bosques en los que se aplica un proceso de reforestación y de respeto de la diversidad biológica”, añade Fabrice Villa.
La madera laminada-encolada permite también la personalización de las obras mediante adaptaciones más controladas. Abrisud realiza proyectos personalizados con elevación de los módulos y simulación en 3D para conseguir que cada piscina o spa encuentre la cubierta que mejor se adapte a su entorno y orografía.
Entre las soluciones más demandadas por hoteles y alojamientos con campos de golf estarían las cubiertas de piscina altas adosadas de madera. Este diseño evita los paseos fríos desde el hotel al área de baño y, además, crea un espacio chill out muy valorado por los profesionales y amateurs del golf durante sus horas de descanso.
La cubierta alta de madera, las circulares o las que protegen los spa exteriores también son las más adecuadas para crear microclimas íntimos el los momentos posteriores o previos a un partido de golf.
“Todos estos diseños de madera para piscinas y spa no solo garantizan una mejor climatización del agua durante todas las estaciones del año, sino que también cuentan con materiales traslúcidos que permite disfrutar de las vistas, creando un espacio apacible y agradable”, finaliza Fabrice Villa.
Abrisud. En 1996 nace Abrisud en Francia para renovar el mercado de cubiertas de piscinas. En 2005, inicia su expansión internacional, hasta alcanzar presencia en 11 países, incluida España. Dirigida por François-Xavier Desgrippes y Jean-Michel Chapuy, Abrisud lidera el mercado europeo de cubiertas de piscinas por su modelo de negocio que aúna diseño exclusivo e innovación. Su I+D y registro de patentes tienen varios premios nacionales e internacionales.
Deja un comentario