El último torneo del «Asian Swing» del LPGA Tour se disputa en Japón y Jiyai Shin tiene las mismas sensaciones que cuando viaja a Corea del Sur a ver a su familia. La número 7 del mundo ganó el Mizuno Classic en los años 2008 y 2010, además de un cuantioso número de torneos en el país donde nace el sol, donde preparó su salto a Estados Unidos. Shin se encuentra allí con familiares, amigos y con un campo que se adapta perfectamente a su principal virtud: la precisión. Durante el 2011, en este mismo torneo, no cometió un solo bogey en cuatro días de competición.
Este año ha ganado ya en dos ocasiones (Kingsmill Championship y RICOH Women’s British Open) pero, evidentemente, busca más y podría convertirse en la tercera jugadora que consigue tres victorias esta temporada, igualando a Yani Tseng y Stacy Lewis. Las pruebas por disputar no son muchas pero si lo consigue Shin entraría de lleno en la carrera por ser la mejor jugadora del año, algo que todavía no ha conseguido a pesar de sus dos grandes y diez victorias en el circuito. Su primera jornada en el Kintetsu Kashikojima Country Club (Mie, Japón), apunta directamente a esa carrera: Jiyai colidera con una vuelta de 68 golpes (menos cuatro).
Con estos primeros 18 hoyos se rompió su racha de más de 72 hoyos sin cometer un bogey en este torneo, pero sus cinco birdies sirvieron de sobra para firmar la mejor tarjeta del día en casa club. Sus rivales tendrán que tenerla muy en cuenta durante los tres próximos días, sobre todo si miran un par de estadísticas sobre su rendimiento a lo largo del año: Shin es tercera en precisión desde el tee de salida y cuarta en greenes en regulación. No en vano ganó el Abierto Británico por nueve golpes de ventaja bajo un vendaval. En Mie las condiciones son más favorables y Jiyai no ha embocado todos los putts, pero el torneo corre también el riesgo de convertirse en uno de sus aplastantes monólogos.
Empatada con ella se encuentra la japonesa Ayako Uehara, que junto a Maiko Wakabayashi y Momoko Ueda, con menos tres, encabezan las opciones niponas en el único torneo del año organizado en su país. Su presencia en los primeros puestos de la tabla no hace sino evidenciar el poderoso circuito nacional con el que cuentan, y su capacidad para forjar a grandes jugadoras. Na Yeon Choi y Shanshan Feng, ganadoras este año del U.S. Women’s Open y LPGA Championship, respectivamente, se encuentran a un solo golpe del liderato con argumentos muy similares a los de Shin (calle, green). Beatriz Recari decidió unirse a este elenco de estrellas al firmar cuatro birdies y un solo bogey en esta primera jornada, y se posiciona perfectamente para conseguir su quinto top 10 del año y superar su mejor resultado de esta temporada (sexta en el Navistar LPGA Classic).
El torneo se prevé muy igualado durante los próximos tres días. Un total de 18 jugadoras en un margen de dos golpes harán valer más que nunca las vueltas cercanas a los 65 impactos, con las que se podría alcanzar una ventaja considerable para obtener la victoria.
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