Maravillosa la remontada que ha realizado Ian Woosnam en las dos últimas rondas para llevarse el Dutch Senior Open. Si el sábado se marchaba a casa club con nueve birdies en el zurrón que no le permitieron empatar en la cabeza con Golding porque un cuádruple bogey al 2 le lastró enormemente su tarjeta, en la jornada final eran siete los que se marcaba el galés que tendrá que agradecer también al inglés que se mantuviera como mero espectador en la exhibición del pequeño gran jugador.
Ambos salían en el partido estelar junto a George Ryall que, al igual que Woosnam, se encontraba a un golpe de un Golding que había mostrado síntomas de debilidad en la segunda ronda al firmar un 71 (-2), después de haber estado durante ocho vueltas consecutivas bajando de los 70 golpes. Con un único impacto de diferencia, el domingo se presentaba sumamente interesante y se esperaba ver como reaccionaria el inglés para saber si era capaz de volver a dominar con mano de hierro el torneo. Por otro lado, las miradas se enfocarían también en Woosnam con la esperanza de verle repetir la machada del sábado.
El principio de la vuelta sirvió para tantear cómo andaba cada uno de ánimo y ver las intenciones del resto, aunque todos estaban más pendientes de no cometer errores que de buscar distanciarse. El único que no estaba tan por la labor de dejarlo todo en manos de la estrategia era Woosnam, que al paso por el cuatro ya sumaba dos birdies y dos bogeys. A esas alturas, Golding ya había firmado su primer birdie en el 3 y se distanciaba de sus dos compañeros de partida en dos golpes. Sin embargo, a partir del hoyo 9 todo dio un giro extraordinario.
Previamente, en el 8, tanto Woosnam como Ryall reducían la ventaja a un golpe con sendos birdies, pero en el siguiente compromiso, Golding se enredaba y terminaba con un doble bogey en su tarjeta mientras que Woosnam salía del green con un birdie más y liderando el torneo con un golpe de ventaja sobre Ryall y dos sobre Golding. A partir de ahí todo le fue favorable al jugador galés, que se marcharía a casa club con otros tres birdies más mientras que sus compañeros se veían incapaces de recortar distancias y se tenían que conformar con ser espectadores privilegiados de la exhibición del gran jugador galés. Woosnam era el Woosie de los ochenta capaz de embocar putts desde su casa y terminó, con todo merecimiento, llevándose su primer triunfo de la temporada, el primero desde que lograra en 2011 la victoria en el Berenberg Bank Masters.
Por otra parte, gran torneo de Pedro Linhart que ha finalizado quinto tras repetir el 71 (-2) de ayer. Dos birdies en los nueve primeros hoyos y un bogey y un birdie en la segunda parte del recorrido han cerrado la actuación del grancanario que, después del segundo puesto en Escocia, suma su segundo mejor resultado de la temporada.
Santi Luna ha firmado también 71 golpes aunque termina en la séptima posición del torneo. El madrileño parecía abocado a terminar al par del campo ya que un bogey en el hoyo 17 le oscurecía el trabajo realizado hasta ese momento, pero un portentoso eagle en el 18 le entregó el -2 en bandeja además de pemitirle mantenerse en el top 10 final.
Miguel Ángel Martín ha terminado trigésimo cuarto tras acabar con 75 (+2) golpes, mientras que Domingo Hospital firmaba su mejor vuelta con 70 (-3) impactos para terminar ubicado en la cuadragésimo séptima posición. José Manuel Carriles finalizaba quincuagésimo mientras que Manuel Piñero lo hacía en el sexagésimo puesto y Antonio Garrido cerraba la actuación española en la sexagésimo cuarta plaza.
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