Tres meses después de su última competición internacional oficial y después de superar el sobresalto que le volvió a dar su muñeca, esa misma que ya le tuvo quince meses en el dique seco tiempo atrás, Jordi García del Moral ha dejado claro que esquivar el quirófano le ha dado hambre de golf y está fino para afrontar las últimas citas del año.
Aunque su guerra no está en el Challenge Tour y podría considerarse que este Crowne Plaza Copenhagen Challenge es una prueba física y competitiva, el castellonense se ha mantenido en todo momento en la parte alta de la clasificación y solventando los problemas planteados por el bello y complicado recorrido danés. De momento, García del Moral es séptimo con -2, a solo dos golpes de los líderes.
En cabeza están el danés Joachim Hansen y el sueco Kristoffer Broberg, un «viejo» conocido… y lo de viejo con muchas comillas, ya que este año solo ha disputado cinco torneos en el Challenge Tour de las que ha ganado tres en una exhibición de poderío casi inédita. Su paso por la primera división del golf europeo ha coincidido con un leve descenso en su rendimiento y, como era lógico por otro lado, ha estado lejos de las cifras estratosféricas del Challenge, pero parece que Broberg ha recuperado la onda y ahora busca el título de número 1 del circuito (está a algo más de 17.000 €).
En la penúltima cita del Challenge Tour (última para muchos, ya que la gran final de Apulia San Domenico está reservada a los 45 mejores), los españoles apuran sus opciones e intentan cumplir sus distintos objetivos. De momento, Pedro Oriol busca mejorar su posición en el ranking y es decimotercero con -1, a tres golpes de Hansen y Broberg; Velasco y Domingo tienen a tiro la final, pero necesitarán rondar la cabeza, del torneo; Adrián Otaegui, después de su gran rendimiento la semana pasada en Chequia, quiere seguir ganando terreno y es trigésimo primero con +1 junto a Eduardo de la Riva (ya clasificado para la final).
Por último, lo tiene más complicado Jordi García Pinto, que ha comenzado con +4 y necesita tres vueltas bajo par para acercarse a la cabeza y ganar las ocho plazas en el ranking que le permitirían acceder a la gran final y seguir soñando con la tarjeta del European Tour 2013.
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