El golf es uno de los deportes que más se aferran a la tradición y que, en lo fundamental, menos ha cambiado con respecto a su concepto original. Sin embargo, como en los demás ámbitos de la vida, el golf ha sufrido ciertas variaciones. Las más sustanciales han llegado en el campo del material, si entendemos por material las herramientas que usamos para practicar esta actividad (palos y bolas, fundamentalmente).
Pese a la idea de los puristas que aseguran que en los últimos veinticinco años el material en golf ha evolucionado tanto que ya no es el mismo deporte, la realidad es que si bien es cierto que los materiales han cambiado (de maderas de caqui pasamos a maderas metálicas, por ejemplo) en lo que a diseño se refiere el golf no ha cambiado un ápice. Quizá sólo en los putters.
En el último PGA Merchandise Show, TaylorMade destapó una gama de palos que llevaba cogiendo polvo en el baúl de los recuerdos unos cuantos años. Se trata de una serie de drivers y hierros de diseño futurista, casi más cercano a la época de Star Wars que a la actual. Los nombraron MOAD (Mother Of All Drivers) y MOAI (Mother Of All Irons) y fueron creados allá por 2009 por la empresa Priority Design, una empresa americana con ideas revolucionarias y la clara intención de dar una vuelta radical al concepto de diseño.
La empresa trabajó entre 2001 y 2009 con TaylorMade y son los responsables de la serie 300 de la marca californiana. Su aportación fue clave en el driver R7, el primero con ajuste de pesos. La gama MOAD fue una de sus últimas aportaciones a la marca y aunque parecía que el golf se había acabado para ellos, el año pasado firmaron con Nike y son los creadores del driver VRS Covert 2.0.
Por ahora TaylorMade no ha indicado las propiedades y virtudes de esta colección. Tampoco les han retirado el cartel de prototipo y, por tanto, aún no se comercializan. Eso sí, no han dejado indiferente a nadie y aunque no tuvieron una gran acogida en su presentación, sí que es posible que en un futuro próximo veamos a alguien en el campo de golf con alguna de estas bellezas en el interior de la bolsa. El tiempo lo dirá pero de momento, ¿qué os parece?
1 comentario a “¿El driver del futuro?”
A mí, me encantan.
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