El inglés Simon Dyson (-15) se ha hecho con la victoria en el Abierto de Irlanda después de que su principal rival, el australiano Richard Green, desaprovechara la oportunidad de disputar un playoff de desempate al hacer tres putts en el último green.
Dyson culmina con la quinta victoria de su carrera una sólida campaña, ya con seis top ten en el año, cuyo momento culminante hasta la fecha había sido su destacada actuación en el Open Championship. Además, se mete en el top 50 del mundo y accede al Bridgestone Invitational que se juega la semana que viene en el Firestone Country Club de Akron.
Dyson resumía así su alegría: “Es una pena que no sea posible embotellar cómo te sientes en algunas ocasiones. Es asombroso, en serio. Probablemente, esta semana haya jugado el mejor golf de mi vida”.
Aunque el desenlace no quedó en sus manos y dependió del postrero error del zurdo Green, Dyson había hecho los deberes y había acabado con dos birdies en los tres últimos hoyos.
Como Dyson, Nacho Garrido puso todo de su parte para dar la campanada y no anduvo lejos. Perfecto desde el tee de salida, acertado en los tiros a green, certero con el putter (solo le recordamos un putt dubitativo en el 16) y magnífico en las escasas recuperaciones que tuvo que afrontar, el madrileño ascendió a la quinta plaza compartida gracias a su 68 final y su -10 acumulado.
Carlos del Moral, el otro español con opciones, finalmente acabó con -1 en el día y tuvo que conformarse con una undécima plaza que le permite asentar sus opciones de conseguir la tarjeta para el año que viene y ascender casi cuarenta plazas en el ránking mundial. Alejandro Cañizares, el tercer español presente el fin de semana, terminó quincuagésimo noveno con +1 en el acumulado.
Mientras tanto, el honor de «mejor local» recayó en el irlandés Peter Lawrie, octavo tras una vuelta de -2 en el día, mientras que los norirlandeses Graeme McDowell y Rory McIlroy, principales reclamos del torneo tras la eliminación de Clarke y Harrington. volvieron a pasar desapercibidas en esta jornada final del Irish Open.
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