Después de jugar los primeros 36 hoyos sin hacer un solo bogey, Ben Curtis tardó poco más de diez minutos de la tercera jornada en descubrir que el camino hacia la victoria no iba a ser tan franco como creía.
Pese a anotarse dos dobles bogeys en los primeros nueve hoyos (en el 1 y en el 8), Ben Curtis se sobrepuso en la segunda mitad de la vuelta y consiguió maquillar su mal comienzo para acabar con un 73 (+1 en el día) que le coloca con tres golpes de ventaja sobre Matt Every (desdibujado después de su esplendorosa primera vu elta) y cinco con respecto a un trío de jugadores de origen coreano: John Huh (nacionalizado estadounidense y ganador del Mayakoba Golf Classic), Seung-Yul Noh y Charlie Wi.
El líder, que ha perdido el status privilegiado que le otorgaba su triunfo en el Open Championship de 2003 y ahora depende de las invitaciones, hizo la gira del desierto en el European Tour y solo ha jugado cuatro torneos este año en Estados Unidos.
Curtis opta a su cuarta victoria en el PGA Tour, un triunfo que no logra desde el 84 Lumber Classic de 2006, aunque para ello deberá superar la resistencia de los jugadores mencionados y de Matt Kuchar, autor de la mejor vuelta del día junto a John Huh, que está en sexta posición a seis golpes del líder, la misma distancia que el estadounidense recuperó en la jornada de ayer. En un campo tan duro como el AT&t Oaks Course del TPC de San Antonio, ninguna ventaja parece segura y más cuando hay en juego un título.
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