Estamos en una época del año en el PGA Tour conocida como el Florida Swing (la gira por Florida) que suele ser muy del gusto de los profesionales por el buen tiempo que ofrece para competir. Sin embargo, la primera jornada del Valspar Championship (antiguo Transitions) estuvo marcada por el frío y unas rachas de viento atípicas en la zona que hicieron que el recorrido de Copperhead se jugara difícil, con solo veinticinco jugadores por debajo del par y un liderato compartido por cuatro jugadores en -3 (68 golpes), el resultado más alto en una primera jornada en los 14 años de historia del torneo.
A modo de Presidents Cup, en la primera plaza nos encontramos a Pat Perez, Matt Every, Greg Chalmers y Dany Lee, dos americanos, un australiano y un neozelandés respectivamente. De los cuatro, puede que el que más esté saboreando el coliderato sea Lee, presente aquí en Innisbrook gracias al top ten conseguido la semana anterior en el Puerto Rico Open, cuando fue segundo clasificado tras el ganador Chesson Hadley. Quedarse a las puertas de la victoria suele ser doloroso pero no para el antiguo campeón del US Amateur. Y es que de ese modo puso fin a una racha aciaga de cortes fallados desde que llegara a Mexico para competir en el OHL Classic at Mayakoba a finales del año anterior.
No es Lee uno de los máximos pegadores del torneo ni destacó su juego de hierros especialmente, pero una vez en los greenes se mostró muy acertado con cuatro birdies, siendo el segundo en la estadística de golpes ganados pateando (3,453). Hace poco se ha pasado al claw grip (grip de bolígrafo) y parece que la adaptación ha sido tan rápida como fructífera. Y eso que es su primera vez en este recorrido y que tras su primer contacto en la vuelta de prácticas del martes, bromeaba diciendo que habría hecho unos 90 golpes.
Los que ya llevan unas cuantas visitas a Copperhead como Matt Every ya saben cuál es la clave en este exigente recorrido. «En este lugar de lo que se trata es de no hacer doble bogeys y quedarte fuera del torneo así», sostiene, al mismo tiempo que rechazaba cualquier tipo de ilusión por acabar el jueves en lo más alto de la tabla. «He jugado lo suficiente como para saber que la primera jornada no importa tanto». Y es que bien sabe él que esto del golf es como se acaba y no como se empieza: su tarjeta se mantenía al par a falta de cuatro hoyos y acabó haciendo birdies en tres de ellos.
El contingente europeo salió bien parado de esta primera jornada, con Nicolas Colsaerts y Matteo Manassero compartiendo la quinta plaza con el -2 (69 golpes) de ambos, mientras que los ingleses Luke Donald y Justin Rose firmaron vueltas de 71 golpes al par.
Hoy viernes se esperan también bajas temperaturas y viento, sobre todo por la mañana, aunque por lo menos esta vez el parte meteorológico ya no pillará desprevenidos a los jugadores. Para un Gary Woodland desconcertado por no saber si tenía ropa suficiente en la bolsa para ponerse, la primera jornada fue «uno de los días más fríos de todo el año». Michael Putnam entregó un 69 tras jugar con dos jerseys.
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