Zona Pro
Charlie Wi, contra las 119 victorias de sus rivales
Carlos Palomo | 12 de febrero de 2012
Al acabar su tercera jornada en el AT&T Pebble Beach National Pro-Am, a Charlie Wi le llegaba una noticia buena y otra mala. La buena: lidera con -15 uno de los torneos insignes del PGA Tour a falta de 18 hoyos con tres golpes de ventaja sobre el segundo clasificado, Ken Duke, con -12. La mala, que a cuatro golpes tiene a un Tiger Woods con -11 hambriento de victorias en el circuito americano que puede ser muy peligroso en una jornada final como la que se presenta en Pebble Beach.
El ataque no le llegará a Wi solamente por parte de Tiger. Por si fuera poco, tiene por detrás pero con posibilidades a jugadores como Phil Mickelson, Dustin Johnson y Hunter Mahan. Estos cuatro jugadores suman entre ellos casi 120 victorias entre todos ellos. 119 para ser exactos. Contrastando estas cifras, Wi buscará mañana su primer triunfo en el PGA Tour.
Tras liderar también al final de la segunda jornada del AT&T Pebble Beach National Pro-Am, Wi se mostraba sincero con la prensa y admitía la presencia de ciertos ‘demonios’ que se le habían aparecido a lo largo de su carrera en los momentos de aparente control de sus vueltas. Una vez acabada la tercera vuelta, volvía a mencionar su gran problema de cara a la última jornada. «Estoy seguro de que estaré combatiendo a mis demonios durante todo el día. El modo en el que me comporte va a ser lo que decida el torneo», afirmaba el surcoreano después de un 69 (-3) sin bogeys en Spyglass.
El mayor peligro, evidentemente, le llegará a Wi en la última jornada en forma de ex número 1 del mundo, aquel que tiene en su haber 71 victorias en el circuito americano. Tiger Woods firmó un 67 (-5) en Pebble Beach para dejarse una gran oportunidad de ataque en el cuarto día, en el que partirá con -11 a cuatro golpes del líder. Los que piensen que son demasiados, que le pregunten a Dustin Johnson por el US Open de 2010.
De este modo, Tiger continúa su progresión de los últimos meses en los que le hemos visto dejándose opciones de victoria en Australia, rindiendo a un buen nivel en la Presidents Cup, ganando el Chevron y quedando tercero en Abu Dhabi. Los cambios de swing comienzan a traspasar lo visual para llegar a los números, que es lo que queda para la historia a fin de cuentas. «La idea de todos esos cambios era conseguir ser más consistente y ahora se empiezan a ver los resultados», teorizaba Tiger tras su 67 en el campo de Pebble Beach.
No debemos también olvidar a Phil Mickelson con sus 39 victorias a sus espaldas en el PGA Tour. Partirá a seis golpes del líder Wi, con -9 después de su tercera jornada de 70 golpes (-2) en Pebble Beach. Sin tantos cambios como Tiger, el zurdo también da muestras de mejoras en sus últimos tres torneos en suelo americano, donde todavía no ha firmado ningún final entre los 25 primeros. «La semana pasada tuve un par de rondas buenas y comencé a pegar a la bola con mucha más confianza. También he tenido dos jornadas buenas esta semana. Puedo notar la diferencia».
La confianza está presente en dos de los rivales más peligrosos de Charlie Wi. Sus demonios ya tienen nombre y apellidos. Y asustan.
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