No existe descanso en la carrera hacia el éxito. Es lo que debe estar pensando Kristoffer Broberg después de llegar, una vez más, al liderato en un torneo del Challenge Tour. Hemos repetido sus registros en los últimos eventos del circuito en varias ocasiones, pero merece la pena recordarlos para ser conscientes de lo que este joven sueco está alcanzando: cuatro torneos disputados, dos victorias y dos top10, tercero y noveno respectivamente. Esta vez ha sido en Ginebra, en el Rolex Trophy. Broberg sale a jugar como en cualquier otro torneo y en un momento dado mira alrededor; se encuentra solo.
Después de dos jornadas disputadas ha conseguido llegar a quince golpes bajo el par del campo (63 y 66 impactos) y cuenta con un golpe de ventaja sobre el surcoreano Sihwan Kim y el danés Joachim Hansen. Podría tratarse de una buena racha de juego, pero sus resultados sobrepasan la imaginación. Esta semana todavía no ha cometido un solo bogey. Escucharle hablar debe ser aún más desolador para sus rivales: “Hoy no he jugado tan bien, concretamente al inicio de mi vuelta, donde pegué varios malos golpes. Afortunadamente, mi juego corto ha estado muy bien a lo largo del día, especialmente mi putt”, declaró Kristoffer. “Pero supongo que es un buen síntoma que pueda llegar a los 66 golpes sin jugar tan bien. Lo hice bastante mejor en los nueve segundos y emboqué muy buenos putts, por lo que afronto las dos siguientes jornadas con más confianza”.
No es difícil imaginarse a Gary Lockerbie, líder en la lista de ganancias del circuito y cuarto clasificado esta semana, despidiéndose de su posición de honor en el Challenge. El inglés ha disputado trece torneos y está contemplando impotente como un jugador surge a mitad de temporada para arrebatarle la primera plaza. Podría suceder esta misma semana y estaríamos ante un hecho único; tan solo en cinco pruebas un jugador consigue tres victorias. Hace no mucho tiempo un tal Tiger Woods nos definía a la perfección lo que suponía dominar en el golf, y era muy parecido a todo esto.
En cuarta posición se encuentran Peter Uihlein, Gary Lockerbie y Andreas Harto, con un global de doce bajo par. No muy alejado de los primeros puestos se encuentra Eduardo de la Riva, con menos once y a cuatro golpes del liderato. El español firmó cinco bajo el par en la primera jornada y en su segunda vuelta llegó hasta menos seis, gracias a siete birdies y un solitario bogey en el hoyo 12, que también cometió el miércoles. Solo un impacto por detrás se ha colocado Carlos Aguilar, que también está jugando a buen nivel, repitiendo los 67 golpes de la primera jornada y encontrándose a un paso del top10, en decimotercera posición. Por su parte, Álvaro Velasco no pudo dar continuidad a las buenas sensaciones obtenidas en el Norwegian Challenge, en el que finalizó segundo, y a pesar de jugar bajo par se encuentra trigésimo quinto con menos tres, a doce golpes del liderato.
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