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Bekker, del infierno al cielo en nueve hoyos

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Arturo Otegui | 06 de junio de 2015

Oliver Bekker ha conseguido renacer de sus cenizas (foto de Emanuel Stotzer)

Si al sudafricano Oliver Bekker le hubieran preguntado en el tee del 10 en qué posición creía que iba a terminar el día en el Swiss Challenge, creemos que ni él mismo habría apostado por el liderato. Bekker ha comenzado erráticamente, con solo dos pares en sus primeros nueve hoyos, aderezados con dos birdies, cuatro bogeys y un doble bogey.

La mayoría de los jugadores con un +4 en sus espaldas, tras un nuevo bogey en el hoyo 12, se conformarían con intentar maquillar su vuelta, pero Bekker ha repuntado como las estrellas y ha terminado su actuación con un parcial de -6 en sus últimos seis hoyos, con cuatro birdies y un eagle. Al final, líder en solitario con -10 y dos golpes de ventaja sobre su inmediato perseguidor, el inglés Gary Boyd, y una inyección de moral considerable.

El torneo no está siendo demasiado favorable para los intereses de nuestros representantes. Luis Claverie ha conseguido su mejor resultado en lo que va de semana, un meritorio 68 (-3) para un acumulado de -3 que le permite remontar veintiuna posiciones hasta la vigésimo octava. El otro español que superó el corte, Sebastián García Rodríguez, es trigésimo segundo empatado con -2.

Recordemos que Javier Ballesteros, Emilio Cuartero, Juan Sarasti, Miguel Cabrera-Bello, Javier Gallegos y Jesús Legarrea no consiguieron superar el corte.

Tras Bekker y Boyd, nada menos que cinco jugadores comparten la disputada tercera posición con -7: el norirlandés Chris Selfridge, el inglés James Heath, el danés Joachim B. Hansen, el galés Rhys Enoch y el escocés Jack Doherty. Pese a tanto y tan buen aspirante, creemos que el ganador saldrá del partido estelar. Bekker debe estar eufórico tras su renacer de hoy, y Boyd necesita una victoria por la que está luchando lo indecible. ¿Serán capaces de gestionar la presión?

«No creo que nunca en mi vida haya tenido un final como ese«, declaró Bekker, tres veces ganador en el Sunshine Tour. «Ha sido como si hoy hubieran jugado dos personas distintas, con unos primeros doce hoyos horrendos. No conseguía hacer nada a derechas y hasta tuve suerte en un par de hoyos. Emboqué un golpe de bunker de calle desde cuarenta metros en el cuatro para birdie, emboqué un par de putts de diez metros y luego fallé cuatro realmente fáciles».

«Para anotar seis bajo en los últimos seis, era un golf completamente diferente el que estaba jugando. Solo encontré algo de ritmo y empecé a pegar buenos golpes desde el tee, lo que me dio la ocasión de dejar mis hierros cerca y entonces emboqué algunos buenos putts».

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