El segundo major del año en el LPGA Tour ha dado el pistoletazo de salida y, como se preveía, el camino hacia la victoria será duro y lleno de dificultades. Las mejores jugadoras del mundo se reúnen en el Locust Hill Country Club para determinar a la segunda ganadora de un grande este año después de que Sun-Young Yoo se hiciera con el Kraft Nabisco Championship el pasado marzo y apenas dieciséis jugadoras han finalizado bajo el par del campo, encabezadas por una gran Beatriz Recari. La española firmó una vuelta de tres bajo par para finalizar en primera posición empatada con Ryann O’Toole y la italiana Giulia Sergas.
Beatriz comenzó su vuelta por el hoyo 10 y en su segundo hoyo cometió el único bogey de su vuelta, un par 5. Precisamente ha sido su mayor acierto en esta primera jornada: minimizar los errores. Beatriz ha conseguido doce greenes en regulación y en los seis restantes ha sabido salvar el par alrededor del green, una tarea que se está mostrando clave de cara a las aspiraciones de las jugadoras en el Wegmans LPGA Championship. La pregunta que rondaba los anteriores majors era por cuántos golpes de ventaja sería capaz de ganar Yani Tseng, que ha jugado el último año y medio a un nivel incontestable, pero esta semana la clasificación se encuentra mucho más abierta y Yani parece haber bajado el pistón, firmando una vuelta de cuatro sobre el par y encontrándose fuera del corte provisionalmente, marcado en mas tres.
Además de un major, lo que se está jugando esta semana en Pittsford es discernir quién supone una alternativa real a la número uno del mundo, quién es capaz de ocupar su puesto cuando ella no está a su mejor nivel. En esta circunstancia Na Yeon Choi, número dos del Rolex Ranking, se ha mostrado dispuesta a recoger el testigo finalizando la primera jornada con una vuelta de dos bajo par y empatando en cuarta posición con un grupo de jugadoras entre las que se encuentra Cristie Kerr (ganadora de este torneo en 2010) Ai Miyazato o Paula Creamer. Son muchas en un margen de golpes muy reducido y el resultado ganador el domingo no estará muy lejano a las cifras que se pueden ver en la clasificación actual: prácticamente el mismo número de bogeys que de birdies.
Azahara Muñoz llega a este torneo en el mejor momento de su carrera profesional, habiendo encadenado unos resultados de escándalo: segunda, cuarta, primera y tercera en sus últimas cuatro participaciones en el LPGA Tour. La estrategia, a pesar de haber logrado su primera victoria en el circuito hace dos semanas, sigue siendo la misma: sumar semana a semana y crearse oportunidades de victoria. Y de ese modo ha comenzado el torneo, firmando una vuelta con 75 impactos que la colocan justo por encima del corte proyectado para la segunda jornada. Una lástima su final con dos bogeys en los dos últimos hoyos del recorrido, que deslucieron una vuelta muy peleada.
El camino ha sido muy similar al que ha seguido Belén Mozo, que ha finalizado el día con dos sobre el par y ocupa la trigésimo novena posición, a tan solo cinco golpes de Beatriz. Peor lo han pasado en el campo María Hernández, finalizando con siete sobre el par, y Elisa Serramià, que lo ha hecho con once mas. Hacer birdies se está mostrando muy complicado y los resultados prometen ser altos si hay un mínimo de inconsistencia, por lo que se prevén movimientos importantes en la clasificación en los próximos días.
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