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Aniversario feliz para Quirós

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Redacción | 13 de febrero de 2011

Álvaro Quirós ha sucedido a Miguel Ángel Jiménez como campeón del Omega Dubai Desert Classic tras firmar una espectacular vuelta que ha tenido de todo, desde un triple bogey a un hoyo en uno.

Tras un fulgurante comienzo en el que no tardó en colocarse liderando el marcador tras firmar eagle en el hoyo 2 y dos birdies más en el 3 y el 5, Álvaro veía como una racha de desafortunadas coincidencias después de abrir de más su tiro a green le llevaba a un aparatoso triple bogey que parecía cercenar de raíz sus opciones de victoria. Sin embargo, un gran birdie en el 9 y, sobre todo, un espectacular hoyo en 1 en el 11 le devolvieron al liderato, puesto que apenas abandonaría unos instantes a partir de entonces.

Si la semana pasada tuvo que vérselas con un danés, Thomas Björn, en el desenlace del Commercialbank Qatar Masters, esta semana ha sido otro súbdito del mismo país, el aguerrido Anders Hansen, su principal rival. Hansen llegó al último green con opciones de forzar el play-off, aunque su lejano putt de birdie se quedó a medio metro de entrar y el danés quedó relegado al segundo puesto compartido con el sudafricano James Kingston, artífice de la mejor vuelta de la cuarta ronda.

Mientras tanto, los principales favoritos se iban difuminando. Tiger Woods y Sergio García compartieron el vigésimo puesto final con sendas vueltas de 75, Rory McIlroy finalizó décimo y Lee Westwood acabó perdiendo todas sus opciones en los dos últimos hoyos. No obstante, Westwood nunca ha visto peligrar su primer puesto en el ránking mundial, ya que Martin Kaymer no se ha planteado como alternativa de poder en ningún momento de este torneo.

Aun así, las dos primeras vueltas de Sergio, impecables, nos han mostrado a un borriolense centradísimo y con muchas ganas de golf.

Entre el contingente español, destaca también el gran cuarto puesto de Álvaro Velasco, que ha compartido dueto con Rory McIlroy y que ha demostrado sobradamente que tiene un hueco entre la élite del golf, confirmando las buenas sensaciones que tuvo ya la semana pasada en Qatar. Además, José María Olazábal va afinando su preparación de cara a Augusta y ha demostrado que aún tiene juego para enfrentarse a los mejores. El donostiarra ha finalizado en el decimoquinto puesto, yendo de menos a más en el torneo.

Rafael Cabrera-Bello ha culminado una gira del desierto de ensueño (séptimo en Abu Dhabi, trigésimo en el Volvo Golf Champions, tercero en el Qatar Masters y vigésimo en el Omega Dubai Desert Classic), y afronta el resto de la temporada con intención de seguir ascendiendo puestos en la clasificación mundial y buscar un hueco en los grandes.

Además del ya mencionado vigésimo puesto de Sergio García (que se ha quedado lejos del tercer puesto que le habría proporcionado el pasaporte al Accenture Match Play Championship), Miguel Ángel Jiménez y Pablo Martín han terminado en el cuadragésimo puesto y Alejandro Cañizares en el quincuagésimo noveno lugar.

Volviendo con el de Guadiaro, Quirós ha logrado una victoria por temporada desde 2007: Alfred Dunhill Championship de 2007 en Sudáfrica, Portugal Masters de 2008, Qatar Masters de 2009, Open de España de 2010, y hoy el Omega Dubai Dessert Classic en su torneo número 100.

Álvaro ha ascendido a lo más alto de la Race to Dubai tras el segundo puesto de la semana pasada en Qatar y el octavo de la anterior en el Volvo Golf Champions de Bahréin. En el primer torneo de la gira del desierto en Abu Dhabi terminó el 23º.

Gracias a la inestimable ayuda de nuestra queridísima compañera María Acacia López Bachiller contamos con las primeras declaraciones de Álvaro Quirós.

“¡Estoy contentísimo, feliz! Sobre todo por haber ganado un torneo en el que estaban todos los buenos y en difíciles condiciones.

En el hoyo dos hice eagle pegando el drive y me pasé unos siete metros de bandera, pero la enchufé desde fuera. En el siguiente, par 5, birdie con una sacada de bunker muy buena dejándola a medio metro. Me coloqué en la posición que quería.

En el cinco otro birdie con un putt muy difícil de izquierda a derecha desde unos cinco metros. Estaba tranquilo, iba jugando muy bien y sentía que llevaba todo bastante controlado.

En el ocho, un triple bogey. Quería jugarla al ‘fade’ pero se me fue la mano un poco más de la cuenta, y soplaba un poco de viento que ha multiplicado el error. Me fui a la palmera, dropé con penalidad, se me quedó clavada en la arena, tuve la mala suerte que diera en una hoja de palmera en el camino, tuve que dropar otra vez… Pero enseguida lo arreglé con otro birdie en el nueve pegando muy buen segundo golpe con el hierro siete y dejando la bola a seis metros, ¡dentro!

El hoyo uno en el once fue un subidón, pegué tres cuartos de wedge desde 143 metros ¡y cata-clá! Siempre es difícil hacer hoyo en uno pero en la última vuelta y bajo presión, mucho más.

En el 14 hice tres putts que me costaron un bogey, en el siguiente par, y el birdie del 16 ha sido la clave para mantenerme en el torneo: di un buen segundo golpe con el wedge, tenía 122 metros a la bandera, la dejé a tres metros y medio y metí el putt.

Llevo tiempo jugando bien, controlando situaciones que antes se me escapaban; la semana pasada estuvo a punto de caer y creo que esta vez merecía ganar.

Esta noche… a celebrarlo con los demás españoles, les invitaré a cenar”.