Zona Pro
Zach Johnson y su victoria despistada
Carlos Palomo | 28 de mayo de 2012
Desde los bunkers de calle no hay efecto de retroceso. No puedes parar la bola una vez que ésta aterriza en el green. Y si la bandera a la que atacas es como la del 15 del domingo en Colonial, te puedes ir al agua como le pasó a Jason Dufner, acabando finalmente con un triple bogey en este hoyo y abriendo las puertas de la victoria a Zach Johnson en el Crowne Plaza Invitational.
El golpe de Dufner en el 15 estuvo cerca de ser perfecto pero apenas unos centímetros separaron la gloria (hubiera sido su tercera victoria en cuatro torneos) de la ruina. Una vez más en el deporte en el que todos buscan hacer más de 300 metros con el drive, el desenlace se decidió en las distancias cortas. Como en el green del 18, donde Johnson olvidó reponer el marcador de su bola a su posición original tras moverlo ante el putt de Dufner.
Fue penalizado con dos golpes y acabó finalmente con 72 golpes (+2) para conseguir la victoria por uno de ventaja. Saliendo con un margen de tres al tee del 18, la confusión pudo costarle cara pero su putt de casi 2 metros fue decisivo. Intrascendente en el momento de tirarlo ya que era para ganar por dos o tres golpes, acabó siendo vital. Como le decía el también devoto Ben Crane en su felicitación, «menos mal que lo embocaste». La versión más vulnerable de Dufner que hemos visto en las últimas semanas concluyó con 74 golpes (+4) que le dieron el segundo puesto en solitario.
Curioso es que de las últimas 15 rondas disputadas en Colonial, fuera la primera por encima del par la que ha dado a Johnson su octava victoria en el PGA Tour. Llevaba desde mayo de 2010 sin ganar, justo la semana que se enfundó la chaqueta de tartán que se otorga al ganador del Crowne Plaza Invitational. Con esta segunda victoria en Colonial asciende al tercer puesto de la FedEx Cup en la que se mantiene en lo más alto, como no, el chico de moda, Dufner.
La última jornada de Colonial será recordada como un domingo de match play puro y duro. Con idas y venidas como suele ser lógico en esta modalidad. Con un Zach Johnson que a la altura del 8 iba dos golpes por debajo del líder Dufner y que entre su paciencia y aciertos fue remontado. También influyó que Dufner después de 30 calles cogidas de 42 en tres jornadas redujo su porcentaje de acierto estrepitosamente al coger 3 de 14 en la ronda final.
Al final lo cierto es que la imagen que se pudo ver en el 18 fue la que mucha gente esperaba. Johnson abrazándose con su caddie Damon Green después de que éste perdiera a su padre dos semanas atrás. La dedicatoria estaba clara y los dedos al cielo de ambos despejaban cualquier tipo de dudas. Pero de repente Green devolvía a Johnson a la realidad. «¿Has movido tu marca antes?», «Sí». «¿La has repuesto?», «No…»
Afortunadamente se dieron cuenta de su error antes de firmar la tarjeta y todo se saldó con un mal menor de dos golpes. Si hubiera firmado el 4 y no el 6 en su último hoyo se le hubiera descalificado y Dufner hubiera resultado ganador. Por cierto, que el despiste fue total en el último hoyo ya que Johnson se saltó el orden de salidas en el tee, algo que sin embargo no conlleva penalidad.
Sergio García concluyó su participación en Colonial despidiéndose del campo que ya le vio ganar con un 68 (-2) para ocupar la decimotercera plaza con -2 en el global. Acabó con birdie en el 18, su cuarto del día en una tarjeta que también incluyó dos bogeys.
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