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Zona Pro

Tiger falla el décimo corte de su carrera

Carlos Palomo | 28 de junio de 2014

El debate más recurrente de los últimos días en el mundo del golf giraba en torno a una sola pregunta: ¿qué podemos esperar de Tiger Woods en su regreso a la competición tras casi cuatro meses inactivo? Ayer conocimos la respuesta, con el anfitrión del Quicken Loans National fallando el corte por cuatro golpes tras acumular un +7 en sus dos primeras vueltas en el PGA Tour desde que se sometiera a una operación de espalda. Sin embargo, a pesar de la normal decepción por irse a mitad de torneo, el ex número 1 del mundo ha encontrado «muchos aspectos positivos» en esta particular puesta a punto de cara al Open Championship.

Uno de ellos es el simple hecho de no estar lamentándose de una demasiado temprana vuelta a los campos. «He vuelto cuatro semanas antes de lo que pensábamos que podría y no ha habido ningún contratiempo», afirmó Tiger tras fallar el décimo corte en sus 299 torneos de su carrera deportiva y el primero en dos años desde que no lograra meterse en el fin de semana del The Greenbier Classic.

En su particular búsqueda de aspectos que invitan a ser optimistas con su juego, Woods señaló que sabe perfectamente cuáles son las parcelas del juego a pulir. «He hecho un montón de pequeños fallos, con errores de cálculo y fallando por el lado malo y no consiguiendo hacer approach y putt en situaciones fáciles. Son pequeñas cosas que puedo corregir, algo que es genial», analizó tras firmar su 75 (+4).

Las estadísticas de su regreso nos dejan a un Tiger que no ha perdido mucha distancia desde el tee, que ha cogido 16 de 28 calles y que ha fallado casi la mitad de greenes en regulación (16 de 36). En el putt, área que más ha estado entrenando en estos meses de recuperación, llegó a sumar un total de 61 en estos dos días. Sigue teniendo capacidad para generar birdies (siete) aunque se vio lastrado por los doce bogeys, cuatro de ellos de manera consecutiva entre los hoyos 11-14 del viernes, y un doble bogey de su tarjeta.

El futuro a corto plazo para Tiger pasa ahora por una desconexión para pasar algo de tiempo con sus hijos antes de preparar el siguiente torneo que jugará. A falta de confirmación oficial, todo hace indicar que será el Open Championship en Royal Liverpool, donde en 2006 consiguió su última Jarra de Clarete. «Voy a llegar a mis hijos a unas pequeñas vacaciones la semana que viene, algo genial, y luego empezaremos a prepararnos».

En la parte alta de la tabla nos encontramos a cuatro jugadores compartiendo el liderato en Congressional: los australianos Marc Leishman y Oliver Goss y los americanos Patrick Reed y Ricky Barnes manejan el ritmo del torneo con sus resultados de -6. Las mejores tarjetas de la segunda jornada fueron presentadas por los ‘aussies’ con sendos 66 (-5) que les harán compartir el partido estelar de la jornada de movimiento.

Especialmente curioso es el caso de Goss, quien a principio de la semana tuvo un divertido episodio con un miembro de la seguridad que no le dejaba entrar en la casa club de la sede del Quicken Loans al no tener su acreditación pertinente. «El chico de seguridad me pedía la acreditación y yo le dije que no tenía pero que era un jugador y tenía exención para jugar el torneo. Me dijo que no me podía dejar entrar y yo insistía en que era un jugador».

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