Una renovación en toda regla. No se puede calificar de otro modo el equipo que presentará Liselotte Neumann esta semana en el Colorado Golf Club (Denver, Estados Unidos). El equipo europeo de la Solheim Cup se impuso en Killeen Castle hace dos años, pero ha visto cómo la mayoría de las jugadoras que triunfaron en Irlanda se quedaban atrás ante la fuerte pegada de otras más jóvenes. El golf europeo ha crecido a buen ritmo, y el combinado que presentará es, a priori, uno de los más fuertes de su historia. Solo cinco de las jugadoras repiten convocatoria.
Suzann Pettersen. La número tres del Rolex Ranking e indiscutible líder del equipo. Desde que la noruega debutara con Laura Davies en una de las primeras ediciones de la competición ha ido subiendo peldaños de autoridad hasta ser la clara referencia del bando europeo. Su victoria en los individuales de 2011 contra Michelle Wie, con dos birdies en los tres últimos hoyos, fue fundamental para que las chicas de Alison Nicholas se alzaran con la copa. Este año lleva dos victorias (una en el LPGA Tour y otra en el Ladies European Tour) y su rendimiento en los grandes ha sido espectacular: dos terceros puestos (Kraft Nabisco y LPGA Championship) y un cuarto (Women’s British Open).
Carlota Ciganda. Una de las debutantes, pero que a lo largo de su trayectoria como amateur ha competido en tantos equipos europeos que es muy probable que se comporte con soltura ante la presión. Carlota es un talento descomunal. Ganadora de la Orden de Mérito del Ladies European Tour en su temporada rookie y tres triunfos en el Ladies European Tour en apenas dos años, adornan un palmarés que promete ser muy abultado dentro de muy poco. Esta temporada ha sido algo más irregular que la anterior, pero es bien comprensible si se tiene en cuenta que se ha estado adaptando al circuito americano, compaginándolo de la mejor forma posible con sus actuaciones en Europa. A medida que juegue más entre las mejores, los resultados llegarán.
Catriona Matthew. Segunda clasificada por el Rolex Ranking dentro del equipo (número ocho del mundo). Esta escocesa de cuarenta y tres años ha ido sacando lo mejor de sí misma a medida que pasaba el tiempo. Su victoria en el Women’s British Open, en el 2009, fue el colofón a una carrera que ya cuenta con cuatro triunfos en América y otros cinco en Europa. A pesar de la fuerza con la que entran jóvenes en el golf femenino hoy día, Catriona se ha mostrado igual o más consistente que siempre. Este año rozó su segundo grande en el LPGA Championship, cediendo solo ante la todopoderosa Inbee Park. Junto a Azahara Muñoz, en 2011, protagonizó una pareja muy difícil de batir.
Caroline Masson. Después de ponerle muy difíciles las cosas a Carlota Ciganda para conseguir la Orden de Mérito de 2012, esta alemana de 24 años se ha convertido en una de las principales referencias del golf europeo. Al igual que la navarra, ha sufrido algo más de la cuenta para compaginar su calendario con los campeonatos estadounidenses, pero esa jugadora que deslumbró por su enorme capacidad de luchar por la victoria cada semana promete dar mucha guerra en la Solheim; en muchas ediciones futuras.
Beatriz Recari. La temporada de la española se describe fácilmente a través de una estadísitica. En el LPGA Tour, solo tres jugadoras han conseguido más de una victoria: Inbee Park, Stacy Lewis y ella. A Beatriz le dolió mucho perderse la última edición de este torneo, y ha trabajado arduamente para que algo así no vuelva a suceder. Ganadora del KIA Classic y del Marathon Classic hace tan solo unas semanas, se ha erigido como una garantía dentro de su equipo. Nadie duda de que estará al nivel como para vencer a cualquiera.
Anna Nordqvist. Esta sueca de veintiséis años es casi una veterana en esta competición, habiendo disputado las dos últimas. Acostumbra a formar pareja con Suzann Pettersen y no es de extrañar: entre las dos fallan muy pocos greenes. La consistencia es su arma más fuerte, como bien indican sus resultados esta temporada en el LPGA Tour: ha finalizado entre las veinte primeras en nueve ocasiones. Sus dos victorias América parecen poco para todas las oportunidades que se produce.
Karine Icher. Su caso es el de una maduración lenta, pero contundente. Esta francesa de treinta y cuatro años ha ganado ya seis veces en el Ladies European Tour y se encuentra en pleno salto a Estados Unidos, donde ya ha conseguido cosechar buenos resultados, como una quinta plaza en el Manulife Financial LPGA Classic a comienzos de julio. Su rendimiento en la Solheim es una incógnita, ya que debutó en la competición en el año 2002 siendo todavía muy joven, consiguiendo un punto de tres posibles. Su triunfo, curiosamente, fue junto a Raquel Carriedo.
Azahara Muñoz. Revelación absoluta de la última edición disputada. La malagueña fue un soplo de aire fresco para el equipo de Alison Nicholas, y se adaptó muy rápido gracias a la ayuda de su pareja de baile, la veterana Catriona Matthew. Su victoria frente a Angela Stanford, con un golpe memorable en el hoyo 17 incluido, demostró que Azahara no solo estaba al nivel necesario como para competir en esta prueba, sino que además podía resultar demoledora. Su emparejamiento con Carlota Ciganda parece una obviedad, ya que supondría una simple prolongación de sus éxitos como amateurs. Este año las cosas no le están saliendo bien, pero la Solheim tiene un efecto de trampolín en las carreras de estas jugadoras. Una buena actuación y, de pronto, el golf parece un deporte más sencillo.
Caroline Hedwall. La primera de las elecciones de Liselotte Neumann. Cinco victorias en el Ladies European Tour adornan la carrera de esta joven de 24 años, que ha ascendido a una velocidad endiablada a la élite. Debutó en la Solheim en 2011 formando pareja junto a Sophie Gustafson, que se perderá esta edición, y a quien podría relevar Anna Nordqvist. No está siendo una temporada sencilla para ella, aprendiendo a habitar entre las mejores del mundo, pero ya ha demostrado de lo que es capaz con un tercer puesto en el Kraft Nabisco Championship. El objetivo a largo plazo son, sin duda, los grandes.
Jodi Ewart-Shadoff. Nadie conocía a esta inglesa de veinticinco años hasta que llegó a liderar con contundencia el Kraft Nabisco Championship de esta temporada. A pesar de no haber ganado todavía en las grandes ligas, Jodi ha demostrado de qué pasta está hecha en los mejores escenarios, finalizando aquel torneo séptima y el US Women’s Open cuarta. Cuanto más difícil ha sido el examen, mejor ha respondido. Es su debut en esta competición y tendrá que demostrar que la capitana no se ha equivocado eligiéndola.
Giulia Sergas. Toda una veterana en la élite con tan solo treinta y tres años. La italiana tiene un rendimiento en los grandes espectacular, habiendo finalizado en todos entre las diez primeras. Los triunfos, sin embargo, siguen siendo su asignatura pendiente y debutará en la Solheim con la confianza de la capitana, que a buen seguro la tendrá en cuenta como comodín durante los dos primeros días de competición.
Charley Hull. Un talento en bruto. La jugadora más joven en debutar en la Solheim (diecisiete años) deslumbró al mundo este año, firmando cuatro segundos puestos consecutivos en sus cuatro primeros torneos como profesional. En el caso de cualquier otra debutante cabría la posibilidad de preocuparse, tanto por su edad como por lo que puede hacer la presión de las citas más importantes. Pero esta chica tiene tanto desparpajo como para cuestionarle el triunfo a la ganadora de la Orden de Mérito (Carlota). Sabe que es muy, muy buena, y está deseando demostrarlo.
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