Han bastado tres torneos de la temporada en el LPGA Tour para sacar varias conclusiones. Para empezar, Inbee Park no está dispuesta a bajarse del número uno del mundo, a juzgar por su actuación la semana pasada en Tailandia; Stacy Lewis y Suzann Pettersen se antojan como sus principales rivales por esa carrera hacia lo más alto del Ranking, pero no andan solas, ya que Lydia Ko, Anna Nordqvist o Karrie Webb también han comenzando fuertes. Eso es lo que acontece en la élite del golf femenino, aunque no convendría descartar un ataque más lejano por parte de cualquier otra jugadora con alguna victoria en su palmarés. En general, la sensación ha sido que el circuito está más abierto que nunca a nuevas caras. No existe una dictadura como a comienzos de 2013. El panorama se plantea amplio y tremendamente competitivo.
Esta semana se corroborarán varias de estas sensaciones y, posiblemente, se contradigan otras tantas. El HSBC Women’s Champions está considerado el grande de Asia por su capacidad de captar a las mejores del globo: diecinueve de las veinte primeras en el Rolex Ranking se verán las caras en el Sentosa Golf Club. Allí, hace doce meses, Stacy Lewis se alzó con la victoria gracias a un acumulado de menos quince, con un impacto de ventaja sobre Na Yeon Choi. Y eso ya debería ser bastante para imaginar qué es necesario para triunfar allí: regularidad, evitar los fallos innecesarios y ser certera con el putter en las distancias cortas. Ellas dos son sinónimo de todo esto en sus mejores días.
Precisamente Lewis parece muy cerca de esas semanas dulces. No solo afrontará la defensa del torneo desde el número tres del mundo, sino que lleva una racha de trece top 10 consecutivos en sus últimas pruebas disputadas. Pettersen tampoco se queda corta: desde que ganara a comienzos de 2013 no ha dejado de subir peldaños en su carrera, que parecía estancada durante los últimos cursos. “Solo quiero dar lo mejor de mí misma en cada torneo”, declaró la noruega. “Creo que eso sería suficiente como para alcanzar el número uno del mundo, sino no seguiría jugando. Es mi motivación para cada día. He tenido diez años geniales en el circuito y no voy a esconder que me encantaría ser la mejor, pero al mismo tiempo quiero ver cómo puedo llegar a ser de buena”.
Inbee afronta una nueva defensa de su trono con la más poderosa de sus armas en buena forma: su putter. Tras el segundo puesto en Tailandia, solo piensa en seguir el frenético ritmo de éxitos que acumuló en los primeros seis meses de la pasada campaña. “Realmente es muy difícil ganar un torneo”, declaró en rueda de prensa. “Se trata solo de mi segunda semana de este año y creo que en cuanto a puntos del Ranking Mundial no hay mucha diferencia entre la primera, la segunda y la tercera, por lo que no sería raro que hubiera cambios pronto. Mi objetivo sigue siendo mantener mi puesto, pero quien consiga antes una buena semana puede cambiar las cosas muy rápido”.
Y no solo en la parte alta, porque la lucha por entrar entre las diez mejores sigue estando muy apretada. Ese puede ser el siguiente peldaño en las carreras de Azahara Muñoz, Carlota Ciganda y Beatriz Recari, ahora situadas entre el vigésimo primero y trigésimo octavo, también participantes una semana más ante las mejores. La malagueña es la que mejor forma ha mostrado en sus últimos eventos, finalizando decimoprimera en Tailandia y en Australia. La recuperación de la que hablamos hace unos días podría hacerse evidente en Singapur.
Deja un comentario